lunes, 24 de marzo de 2014

Jablonski v. Ford Motor Co.

Como indiqué en la entrada anterior intento escribir sobre cosas que merezcan la pena o que al menos me resulten curiosas. Pero ahora que tras la anterior entrada, que venía motivada por la indignación que venía rumiando, tras haber visto un poco por encima un caso famoso (al menos al otro lado del charco) creo que merece la pena escribir sobre él.


No me voy a liar con cuestiones legales (que nadie se asuste) por ir dirigido a un público indeterminado y porque no creo que a nadie le interese lo más mínimo. Simplemente he de mencionar que es un ejemplo de "Punitive damages", figura propia de los sistemas legales anglosajones, que no se encuentra en nuestro Derecho y que son las típicas "indemnizaciones exageradas que salen en las películas" (aunque a más de uno le rechinen los oídos y le salga espuma por la boca al leer esto).


Para irnos poniendo en situación, en el año 2010 Toyota y su modelo Prius de mayo de 2009, reconoció que varios modelos de sus vehículos híbridos contaban con un defecto en el sistema de freno hidráulico, que hacía que reaccionase con lentitud cuando hacía frío, lo que implicó que se tuviesen que retirar más de muchos coches en todo el mundo (y su Director General fue interrogado en el Congreso de EEUU). Pero como todo, el tiempo pasa y si una compañía es eficiente y hace los deberes, se mantiene en el mercado.

El caso que nos ocupa y que viene a colación con los problemas en los coches, es el de Jablonski v. Ford Motor Co. (Jablonski contra la Corporación Ford). ¿Qué sucede cuando se presentan demandas en EEUU contra empresas que actúan con mala fe? Vayamos por partes.

La controversia en este caso era sobre la seguridad de los depósitos de gasolina en varios vehículos de la plataforma Ford Panther (un esquema que usaron los vehículos descritos a continuación): Lincoln Town Car, Mercury Grand Marquis, Ford Crown Victoria y su versión para persecuciones policiales (el Ford Crown Victoria Police Interceptor) porque sí, esos vehículos existen. 

Sin entrar en cuestiones técnicas y simplificando, decir que todos esos vehículos llevaban el depósito de gasolina instalado en el eje trasero del coche, entre las ruedas traseras (a diferencia del resto de coches, que llevan instalado el depósito delante del eje trasero). Siempre se intenta buscar un lugar donde no le afecten las deformaciones por impacto, ya que un impacto puede llegar a comprimir y calentar tanto el combustible que el depósito se incendie y, en el peor de los casos, explote.

Esta cuestión no era nueva y no se limitaba a los que seguían el esquema Panther, puesto que unas décadas antes hubo un modelo, el Ford Pinto, que le ocurría exactamente lo mismo (y si no mira el video):


https://www.youtube.com/watch?v=3G_dt-lQVS8 

Ford Pinto



En 2003, en el Condado de Madison, Ilinois, el coche de Dora y John Jablonski (Un Lincoln Town Car de 1993) se detuvo por unas obras en la construcción de la carretera I-270. Un conductor que iba detrás de ellos, se distrajo mientras buscaba sus gafas de sol  y no se percató de que el tráfico se había detenido, por lo que impacto contra el coche de los Jablonski a una velocidad de entre 56 y 65 millas por hora (aproximadamente entre 89 y 104 kilómetros hora). Como consecuencia del impacto el depósito de gasolina del Lincoln  se aplastó y se prendió fuego al coche, causándole la muerte al hombre y quemaduras a la mujer.
Un Lincoln Town car de 1993


Un jurado finalmente otorgó una indemnización 43 millones de dólares en daños y perjuicios a los demandantes, incluyendo $ 15 millones en concepto de Punitive Damages. Los demandantes alegaron que el tanque de combustible del Lincoln había sido diseñado negligentemente y que además Ford había incurrido en una conducta deliberada e injustificable al no informar a los propietarios de los vehículos del tipo Panther del peligro de estos depósitos y no haber procedido a su retirada o su sustitución (porque conocían el defecto). Un informe de ingeniería de Ford de 1971 estableció que modificar el depósito para volverlo seguro, implicaría un coste de 9, 95 dólares por vehículo y se decidió no modificar el diseño de los vehículos del "tipo Panther" a partir de 1979.

Si bien los vehículos policiales (los de persecuciones a los que aludía anteriormente) fueron actualizados por medio de unos kits, en ningún momento se notificó a los propietarios de vehículos civiles.

Ejemplo de versión Interceptor



Ford protestó por la admisión a prueba de una lista con 416 presuntos incidentes similares que involucran incendios pos colisión en este tipo de  vehículos. 


Como decía al principio no es único este caso: A inicios del verano de 1999, un jurado de California dictó un veredicto en concepto de Punitive damages por importe de 4,9 millardos de dólares estadounidenses contra General Motors. En el día de Nochebuena de 1993, Patricia Anderson y dos familiares suyos sufrieron horribles quemaduras en más del 60 por 100 del cuerpo al colisionar e incendiarse su Chevrolet Malibu, un viejo modelo, cuyo depósito de gasolina estaba situado muy próximo al parachoques trasero. La indemnización compensatoria fue de 107 millones de dólares, siendo el record en indemnizaciones hasta la fecha.

Conclusión: respondiendo a la pregunta que lanzaba al principio hay que decir que al final si obran de mala fe terminan pagando tarde o temprano pero ¿no es triste? ¿no sería mejor gastar un poco y evitar sufrimiento y dolor innecesario a la gente? por eso en ocasiones dan ganas de decir aquello de:- Paren el mundo que me quiero bajar. Menos mal que estas cosas no son "tan habituales" y tienden a desaparecer, que es el verdadero mensaje, el de la esperanza.

"Cada vez que un hombre defiende un ideal, actúa para mejorar la suerte de otros, o lucha contra una injusticia, transmite una onda diminuta de esperanza." Robert Kennedy.

Aqui la Sentencia de  Jablonski v. Ford Motor Co: https://www.state.il.us/court/Opinions/SupremeCourt/2011/September/110096.pdf


Historia del Kitesurf


Como dije al comenzar este amago de blog, escribo en él cuando la ocasión lo merece y veo algo que merece la pena contar.

Hace relativamente poco conocí la historia de una chica cuya vida dio un giro dramático tras un aterrador suceso (que aún resuena en la memoria de muchos) que le costó un ojo, pero con una fuerza envidiable, una serenidad y unas ganas de vivir (como transmite su mirada y sus palabras) dignas de elogio, consiguió sobreponerse a la adversidad.

No me voy a referir a ella porque no me encuentro a la altura, la verdad. Una cosa es hablar de personajes históricos, pero cuando la cosa versa de la intrahistoria (a la que tanto aludía Unamuno) servidor no se ve digno de escribir una líneas.

Indica que se refugió mucho en el deporte y en concreto en una modalidad de riesgo que es el kitesurf, que quien haya estado en Tarifa (como ella, originaria de allí y considerado uno de los mejores lugares del mundo para practicarlo) o en Los Narejos y en la Isla del Ciervo (sin ser originario, como en mi humilde caso) habrá oído hablar o visto sus practicantes en acción.

Lo primero que debe mencionarse es de donde proviene el término que da nombre a este deporte: Kitesurf, de la fusión de Kite (cometa) y surf. 


El surf es el deporte que consiste en deslizarte en una ola sobre una tabla. Como cualquier deporte siempre hay polémica respecto de su origen. Algunos aluden a que proviene de Polinesia, pero parece ampliamente aceptado que el origen del moderno surf está en Hawái, donde era practicado por sus moradores originarios como algo más que una diversión, siendo considerado un arte el cabalgar las olas a lomos de sus tablas de madera de Acacia koa, arból del pan y Erythrina sandwicensis (los tres tipos de árbol usados en la construcción antigua de tablas). Habría que esperar hasta el Siglo XX para que se produjese la aparición del surf moderno en EEUU y Australia (George Freeth es considerado el padre del surf moderno).

Pioneros


Posteriormente, a mediados del Siglo XX se produjo la aparición del Windsurf  (que no tiene nada que ver con el Kitesurf). En el Windsurf se utiliza una vela sujeta a la tabla, que fue concebida por vez primera en 1948 por Newman Darby y su "Sailboard".

Publicidad original del Sailboard
Posteriormente el invento fue refinado hasta llegar a manos de Jim Drake, ingeniero aeronáutico y "padre del Windsurf".

Windsurf

Centrándonos de nuevo en el Kitesurf (y sin entrar en polémicas sobre que disciplina es mejor, más rápida y "molona") que es el motivo de esta entrada, hay que comenzar hablando de la cometa (pero no hay que remontarse 3000 años a que la inventasen los chinos).

Desde siempre el hombre ha soñado con volar (y porque no decirlo también, evadir impuestos). En 1800 George Pocock, profesor de escuela británico, inventó un carro tirado por cometas como medio de transporte alternativo a los caballos para no tener que pagar el correspondiente impuesto de la época.

El Charvolant, inventado por George Pocock


Posteriormente en 1903 Samuel Franklin Coody, uno de los pioneros de la aviación, logró cruzar el Canal de La Mancha en un bote impulsado por una cometa. Habría que esperar a los años 70 en que se desarrollaron nuevos materiales como el kevlar, spectra, dyneema o coramid (ojo, que todas estas fibras están registradas) que permitieron la creación de cometas más ligeras (y chalecos anti balas, entre otras cosas).

Un ejemplo del sistema de Coody


A partir de este momento es cuando la cosa se complica y son muchos los que se proclaman como creadores  del Kitesurf. Si atendemos a los documentos oficiales, parece que ese honor lo tiene Gijsbertus Adrianus Panhuise, pese a que otras personas como los Hermanos Legaignoux se hayan autoproclamado también. Mencionar que en los 70 Dieter Strasilla creó el esquí con cometa (y en el 79 patentó la primera cometa hinchable pensada para la práctica de Kitesurf).




En Octubre 1977 Gijsbertus Adrianus Panhuise consiguió la primera patente de este deporte (que no explotó comercialmente) que describía como un deporte en el cual se navegaba utilizando una tabla de surf impulsada por una especie de paracaídas al que estaba unido por un arnés, por lo que es considerado el creador del Kitesurf. 

Dibujo de la patente nº NL07603691 de Gijsbertus Adrianus Panhuise


En 1978, el estadounidense Dave Culp, otro ingeniero, diseñó el la primera cometa hinchable. Por su parte Bruno Legaignoux y Dominique Legaignoux, patentaron en Noviembre de 1984 con el nº de patente US4708078 la cometa hinchable que se utiliza en la actualidad para practicar este deporte. También a principios de los años 80, Arnaud de Rosnay (Francia), durante una de sus travesías del canal, utilizó una tabla y una cometa en vez de una vela de windsurf. En la misma época, Andreas Kuhn (Suiza), realizó pruebas con un híbrido entre el esquí y el parapente. Aunque no es objeto de esta entrada, decir que en los 90 apareció el Kite buggy (lo mismo, pero en tierra y sobre un triciclo).

Imagen de Bruno en sus años mozos


Como era el equipamiento en los 80

Para hablar de la consolidación del Kitesurf como deporte hay que esperar hasta 1997, año en que los hermanos Legaignoux (que aqui si tienen todo el mérito) se asocian con Neyl Pride, para producir un pequeño número de cometas vendidos bajo la marca "Wipika". En 1998 Don Montague y Robby Naish solicitaron una licencia a Bruno, para desarrollar cometas. Don Montague desarrollaró un software que le permitió diseñar cometas mayores en menos tiempo, lo que supuso un momento decisivo para el desarrollo de este deporte.

El nacimiento de Kitesurf como un deporte de masas comenzó realmente en 1998, cuando Joe Keuhl organizó el primer evento de Kitesurf (también llamado Kiteboard), que tuvo lugar en Maui (Hawai, EEUU). La competición contó con todos los grandes nombres del Kitesurf del momento. Flash Austin ganó la competición (debajo un documental con la historia)





Conclusiones:

Como puede verse el Kitesurf ha sido un deporte intimamente ligado al desarrollo tecnológico. Desde que aparecen nuevos materiales, el boom es total y no dejan de sucederse los inventos y el desarrollo del mismo. El problema, como suele suceder siempre, es determinar con pruebas quién dice la verdad y parece que por todo ello Gijsbertus Adrianus Panhuise debe ser considerado el creador del Kitesurf. 

En todo caso debe decirse que este deporte extremo, por que lo es, tiene un gran futuro por delante. El record de velocidad lo ostenta Roub Douglas, que alcanzó 55.65 nudos en Luderitz (Namibia) y sino que alguien me diga, sin entrar en conflicto con el windsuf, otro deporte en que alcances esa velocidad en el agua. Tiene su gran asociación, la IKA (International Kiteboarding Association) con lazos en 65 países, que estima que en la actualidad 1.500.000 personas practican este deporte, lo que demuestra que goza de buena salud.

Por último, decir que estuvo a punto de convertirse en deporte olímpico para Brasil 2016, pero lamentablemente el windsurf le quitó la plaza. Con un poco de tiempo, suerte y paciencia, llegará el día en que lo veamos en unos Juegos Olímpicos y podamos disfrutar de este espectáculo.


Los 10 mejores lugares para practicarlo:
http://news.discovery.com/adventure/extreme-sports/worlds-top-10-kiteboarding-spots.htm
Página oficial de la IKA:
http://www.internationalkiteboarding.org/

 ¡Salud y suerte!