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| El Entierro de la Sardina, por Francisco de Goya |
Febrero es el mes
del Carnaval en España, terminando el martes antes del Miércoles de Ceniza ,
que es el último día antes del inicio de la Cuaresma católica , 40 días de
ayuno y abstinencia. Y es en ese último día en que se celebra el acto que da
nombre a esta entrada: el entierro de la sardina.
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| Cartel de 2015 |
Esta celebración
suponía la despedida del caos, la libertad y los institntos primarios del
pueblo llano durante el carnaval y su transgresión frente a los valores
vigentes de las instituciones. La primera imagen que se tiene de esta fiesta es
del cuadro de Goya del mismo nombre. En cuanto a los origenes de esta fiesta,
son algo oscuros, habiendo numerosas versiones del mismo, porque lo cierto es
que nadie sabe cual es la verdadera.
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| Carlos III. El mejor alcalde de Madrid |
Una de estas teorías se remonta al siglo XVII, durante el reinado del Rey español Carlos III. En un momento no conocido de su reinado llegó a los mercados de Madrid una partida de pescado en mal estado. Ante la situación de olor nauseabundo se ordenó enterrar el pescado en la Casa de Campo (motivo por el cual es allí donde se celebra el entierro). A fin de dar mejor imagen del monarca la historia se cambió un poco, contándose que con la finalidad de celebrar el carnaval con sus súbditos, Carlos III mandó traer sardinas y vino para celebrarlo al aire libre, repartiendo el pescado de manera altruista entre la gente, pero con tan mala suerte que el día de la celebración hizo mucho calor, provocando que se comenzase a propagar un olor insoportable a pescado. Se mandó enterrar el pescado y la gente comenzó a llorar al ver como se quedaban sin comida gratis y por dar comienzo al periodo de abstinencia de la Cuaresma.
Otra teoría dice que durante la Cuaresma se sacrificó un cerdo (cerdina) como protesta ante la abstinencia y el ayuno tan estricto de aquellos días. Dicha tradición al ser transmitida de manera oral hizo que con el tiempo mudase cerdina por sardina. Otra teoría, que enlazaría con la primera, considera que lo que llegó a Madrid no fue una partida de pescado en mal estado sino de cerdos contaminados, hecho documentado por los cronistas de la época. Aunque parezca extraño, existe una relación entre los cerdos contaminados y las sardinas. En aquella época lo asalariados tenían derecho a 10 minutos de almuerzo, donde se solía comer un pedazo de pan con tocino o panceta, que popularmente se conocía como sardina, motivo que explicaría el nacimiento de esta traidición, tal y como explica la "Alegre Cofradía del entierro de la Sardina".
Otra teoría dice que durante la Cuaresma se sacrificó un cerdo (cerdina) como protesta ante la abstinencia y el ayuno tan estricto de aquellos días. Dicha tradición al ser transmitida de manera oral hizo que con el tiempo mudase cerdina por sardina. Otra teoría, que enlazaría con la primera, considera que lo que llegó a Madrid no fue una partida de pescado en mal estado sino de cerdos contaminados, hecho documentado por los cronistas de la época. Aunque parezca extraño, existe una relación entre los cerdos contaminados y las sardinas. En aquella época lo asalariados tenían derecho a 10 minutos de almuerzo, donde se solía comer un pedazo de pan con tocino o panceta, que popularmente se conocía como sardina, motivo que explicaría el nacimiento de esta traidición, tal y como explica la "Alegre Cofradía del entierro de la Sardina".
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| Diseño de 1981, de la Alegre Cofradía del entierro de la sardina de Madrid |
Lo importante al final es que ya sea realidad o ficción, el entierro de la sardina es un clásico de la tradición carnavalesca y una ocasión más para la fiesta.
